Apasionada por inspirar a otros

¡Hola! Soy Marta, la mente inquieta y apasionada que está detrás de Educrece. Me encanta leer y estar en contínuo aprendizaje, me apasiona ayudar a los demás y transmitirles lo que sé.

Creo firmemente en que la comunicación es la base de las relaciones personales y que juntos podemos construir una sociedad mejor. 

Soy logopeda desde hace más de 15 años, lo que me ha permitido conocer y acompañar a muchas familias y a sus hijos e hijas a lo largo de este tiempo. Mi profesión me ha permitido desarrollar ojo clínico y ver más allá de lo que se ve a simple vista.
 

Soy madre de dos niños, que son mis maestros en este camino que es la educación. Antes de ser madre tenía muy claro la madre que quería y, lo mejor de todo, que iba a ser, hasta que me dí de bruces con la realidad. Miedos, dudas, inseguridades, culpa, avances, retrocesos y unas cuantas preguntas que me hacían cuestionarme cada día: ¿lo estaré haciendo bien?, ¿es esto lo que quiero para mi familia?, ¿es así como quiero educar a mis hijos?...
 

Sentía que no estaba del todo cómoda con las decisiones que tomaba, que algo no encajaba conmigo, que no estaba donde quería estar; hasta que buscando, indagando e informándome di con la educación consciente, la educación respetuosa o la Disciplina Positiva, muchos nombres para una misma cosa, salirse de la educación tradicional, la que hemos recibido, de las relaciones verticales para hacerlas horizontales, para encontrar un sitio en el que sentirte parte y pertenecer y me dije “¡ahí es Marta!, esto te encaja y es para ti”
 

Leer, leer y leer... mucha teoría y ¿la práctica qué? ¡Qué difícil eso de pasar a la acción! ¿Me entiendes, verdad? Altibajos, hoy me funciona, mañana no, hoy me mentalizo y al final no me sale... ensayo-error, paciencia, compasión y práctica, mucha práctica.
 

Este camino de contínuo aprendizaje y autoconocimiento ha supuesto para mí un reto, una experiencia que quiero compartir, siento que no es justo guardarme para mí lo que sé y lo que he parendido para llegar a ser quien soy ahora y sé que compartir mi experiencia contigo te puede ayudar. 
 

Te mereces vivir una relación con tus hijos e hijas basada en la confianza, el respeto y la conexión porque la vida no se mide en tiempo, la vida se vive en momentos y son esas pequeñas cosas del día a día las que marcan la diferencia.
 

¡Acompáñame en este maravilloso proceso de autoconocimiento, yo te guío! Tú...confía, eres sabia. 
 

¿Me das la mano?